Quercus

Un perfume más contenido que una colonia tradicional. Pero con el mismo atractivo.  No tan estirado como una camisa formal, pero igual de fuerte que una copa antes de la cena. No tan reconocible al instante como un cítrico, pero con la misma vivacidad Pero, veamos... ¿qué se oculta tras la confusión? ¿Podría ser albahaca? ¡Eso mismo! Tan luminosa como el día, tan fresca como un arroyo de montaña calentado por el sol. Acompañado de notas florales blancas y limpias (jazmín, lirio del valle) y cardamomo; aquí radica la frescura más singular, sin la incomodidad que despierta lo irreconocible y lo nuevo. El musgo, que amortigua la transición de este viaje olfativo hacia las profundidades soleadas del ámbar, se combina con el pachulí para regresar a terreno conocido. Quercus, como todo el mundo sabe, es el término en latín para designar el roble, el árbol nacional de Reino Unido.
Familiar, pero a la vez muy extraño.